Este verano, desde luego no ha sido el más propicio para rutear con la moto; la entrada de hoy y la anterior así lo atestiguan. Un par de rutas buenas no mola, pero es lo que hay, el año que viene será mejor seguro.
Voy directamente al grano. El año pasado prometí una ruta por Asturias y con lo de hoy creo que voy a cumplir con creces. Siempre quise ir a Somiedo, el parque natural asturiano famoso por los osos pardos y los urogallos, así que allí me fui a ver lo que había. Siguiendo aún más adelante llegué a la zona final de la ruta: los lagos de Saliencia. Belleza es la palabra que mejor define a esa zona, pero lo primero el mapa:
El día empezó bien, con buena temperatura y un bonito sol, que poco a poco se fue ocultando entre nubes hasta casi desaparecer por la tarde. La ruta en sí no tiene mucha pérdida. Lo primero hay que subir hasta Villablino, la capital de la cuenca minera de Laciana, y a partir de allí continuar por Babia hasta el puerto de Somiedo. He de decir que toda esa zona montañosa es espectacular, llena de paisajes de ensueño, pero la carretera era mala con ganas y además estaba más ocupada por vacas y terneros que por coches y motos jeje.
Como éramos novatos en la zona, al llegar a Pola de Somiedo, fuimos a un centro turístico donde nos informaron de la ruta de los lagos de Saliencia, y sin pensarlo mucho nos fuimos para allá. Hasta allí nos quedaban 20 km,que hasta el pueblo de Saliencia muy bien, una carretera arreglada nuevecita sin un bache, pero que de allí en adelante mejor ni hablar, porque lo raro era el asfalto. Horrible.
Y al fin llegamos al final de esa "carretera" a media tarde, justo en el alto de La Farrapona (la foto es la testigo):
Sí vale, tú también... . El caso es que no había nadie que nos pudiese sacar la foto juntos, pero bueno.
Y nada, a partir de ahí a pata, osea andando porque hasta los lagos se tenía que ir por un camino de tierra muy irregular. La pena fue dejar a la "rum-rum" solita en el parking...pobrecilla.
Penas aparte, nos pusimos a caminar, y después de unos 20 minutos llegamos al primer lago, y para nosotros último, porque era tarde y lo que hay que andar en un sentido luego hay que desandarlo en el otro jeje. El lugar era la leche:
Ya estando en el lago, la sensación de paz era increíble, no se oía ni un alma. Impresionante, así de simple. Asturias patria querida!!jeje.
Luego ya por fin, al llegar a la ribera del lago pudimos comer el bocata, el cual ya me estaba llamando desde hacía un buen rato... :
¡Pero que borde soy madre mía! ¡Comiendo y ladrando a la vez! jeje.
Ya comidos, aproveché la tarde para ponerme más cómodo e ir a investigar por ahí a ver que había jeje :
Parezco Jesús Calleja de verano... con el pantalón del Barça y unos playeros de Star Wars; lo justo para irse al Himalaya a hacer un ochomil no? Y como esta hay unas cuantas fotos:
Esta última mola, estoy subido encima de una especia de estructura metálica que había allí. Parecía los restos de una especie de estación de bombeo de agua:
Diréis: este gilipollas sale en todas las fotos. Verdad es. Pero el caso es que mi media naranja no gusta de escalar por las rocas como yo, cual cabra montés, y claro, alguien tiene que hacer las fotos para el recuerdo jeje : ).
Y nada, poco a poco se nos fue pasando la tarde y al final me dio por meter los pies un rato en el agua, y sorpresa: los peces me comían las pieles muertas de los pies! Como esas imágenes que salen de vez en cuando en Callejeros Viajeros cuando se van por China o Corea. La ostia:
Pobrecillos, tan hambrientos tienen que estar para comer mis pieles muertas revenidas y rancias. En fin.
Y poco más, al final nos recogimos y tiramos cuesta arriba a por la "rum-rum", que ya era hora.
Nos fuimos con una sensación muy buena pero también triste, porque estos lugares te dejan una marquita en el corazón y siempre quieres volver. Pero nos fuimos, aunque no os quiero dejar sin algunas fotos impresionantes:
Id, os gustará y mucho. Sobretodo si amáis la naturaleza como yo. Y nada más, espero que os haya gustado y también espero publicar pronto otra vez, ese es mi deseo. Hasta pronto!
