viernes, 20 de agosto de 2010

O Cebreiro, e logo Samos, e tamén O Courel








Hola! No, no me he muerto, ni yo soy un doble de Markos que se hace pasar por él; soy el verdadero Markos vivito y coleando, y después de un paréntesis, aquí vengo de nuevo con nuevas rutas y nuevas fotos. Hoy os dejo las fotos de una ruta muy "Xacobea", al pasar muchos tramos por el Camino de Santiago. Ha sido una ruta muy bonita, casi en su mayor parte por la vecina Galicia, de nada menos que algo más de 200 km, llena de verdes paisajes, altas montañas y sagrados templos, luego ya lo veréis. Primero, el mapita que tanto me gusta jeje:



Pues nada, sin más, y después de una breve parada para repostar las "rum rum" en La Portela, salimos quemando el asfalto hasta nuestra primera parada: O Cebreiro. Para ello, primero debíamos llegar hasta Pedrafita y ya luego tomar un desvío para empezar la ascensión a O Cebreiro;este primer tramo se hizo muy divertido aún en ascensión, era una carretera muy curveada que se hizo muy entretenida. Ya después de Pedrafita, el desvío nos dejó otra carretera como la ascensión hasta allí, aunque mejor; una buena vía bien ancha que nos ofrecía una conducción segura y alegre. Como siempre, los paisajes que nos rodeaban, eran impresionantes, miradlos si podéis detrás nuestra jeje:





AH, que queréis más monerías? Pues tomad!



Ahora en serio, mirad que vistas se tomaban un poco más abajo de O Cebreiro:






Pues como ya dije, un poco más arriba desde donde tomé estas vistas está O Cebreiro, un pequeño poblado-santuario, donde los peregrinos se paran a reponer fuerzas y también a contemplar el Santo Grial, sí, he dicho Santo Grial. No pensaréis que me estoy haciendo el interesante, por supuesto puedo dar fe de la existencia de este objeto sacado de una peli de Indiana Jones, aquí abajo tenéis la foto de él:





Esta pequeña copa, codiciada por caballeros, nobles, duques, papas, reyes y hasta por el mismísimo "Führer" Adolf Hitler, que pensó que estaba en el monasterio de Montserrat, estaba delante nuestra, al menos una copia más, de los muchos de santos cálices repartidos por el mundo. A Edu, este objeto le producía admiración, y me hizo constar expresamente su presencia allí, es más, este texto que os presento a continuación me lo pasó él:

"Dentro de Galicia son también muchas las teorías que se barajan sobre la ubicación del Grial. Todas ellas se hallan plagadas de disonancias, abundando las distintas versiones, pues es un trabajo difícil el lograr datos exactos sobre el tema debido a los cambios producidos a lo largo de los siglos. Esta es la idea que transmite Arias San Jurjo:
"Es tan oscuro todo lo que se refiere a las leyendas conocidas sobre el Santo Grial, a pesar de los estudios hechos por las personas consagradas en Irlanda, Inglaterra, Francia y Alemania a investigar los orígenes y fuentes de su Historia, que han llegado profundamente alterados y corrompidos en nuestros días, en las transformaciones que sufrieron en el transcurso de los siglos, al pasar de unos países a otros, en una época de profunda ignorancia, y, especialmente, al sufrir las civilizaciones céltica y germánica el choque de la adelantada y avasalladora civilización romana,impuesta con el filo de la espada y con el exterminio de todos los pueblos que no tuvieron resignación para vivir como esclavos".
A pesar de estos inconvenientes, las leyendas han llegado hasta nuestros días y están en la mente de la gente. De todas ellas la que tiene una mayor difusión es la que proclama al santuario de O Cebreiro como custodio del Santo Grial. Son muchos los autores que defienden esta tesis." (Texto externo que reproduzco desconociendo la fuente)

No se de donde lo sacaría, pero creo que deja muy clara su opinión. Para mi, es una reliquia medieval más de las miles que surgieron en la Edad Media. En fin, más allá del cáliz, la iglesia en donde estaba era pequeña pero acogedora:







Por fuera también molaba:




Pues más allá del santuario y la iglesia, el poblado de O Cebreiro se dejaba visitar muy bien, era pequeñito pero acogedor y donde bullía la vida con los muchos peregrinos y visitantes que había. Dándonos un paseo, olíamos el pulpo "a feira" que servían en las tabernas y se nos hacía la boca agua; eran poco menos de las 5 de la tarde y ya con ganas de comer! ese olor es irresistible! jeje. Aquí podéis ver un poquito de O Cebreiro en este par de fotos:







Y nada, a quemar goma otra vez. Si nos enrollábamos mucho llegaríamos a casa a las mil! La siguiente parada era Samos, un pequeño pueblo metido en un valle lleno de tranquilidad en el que existe un monasterio impresionante aún habitado. Hasta Samos la carretera estaba bien, aunque había tramos con el asfalto viejo y con algún bache. Ya en Samos, el centro del pueblo era el monasterio, lo dominaba todo. Era un edificio imponente, escondido entre montañas:





Guay no? Pues mirad ya más de cerca:








Aunque quizá lo mejor del "mosteiro", era la entrada, que dejaba ver su estilo decimonónico neoclásico, y una cruz con sospechoso parecido a la cruz templaria... :






Me dio pena no disfrutar más de la visita a Samos, no teníamos mucho tiempo, pero en lo poco que estuvimos pudimos apreciar esa magia que debió inspirar a unos monjes para querer fundar en aquel lugar apartado un "mosteiro" tan espectacular como este. Como broche final a Samos, os dejo estas fotos:












Poco más ya puedo contar, de Samos a casa aún quedaba mucho, con la sierra de O Courel por medio, que por cierto, no dejéis de visitar en cuanto podáis, es espectacular y maravillosa, la naturaleza en estado puro. Las carreteras por allí no son lo mejor, pero son las que a mi me gustan, serpenteantes y lentas, con tramos en los que los árboles no dejaban pasar la luz y daba un efecto nocturno de película. Ya a partir de Folgoso do Courel, la carretera cambió, era una vía nueva y muy ancha hasta Quiroga, y de allí a Toral, mi pueblo, la Nacional VI ya nos recordaba que el fin del viaje estaba cerca. Como así fue, como siempre, todo acaba, pero lo importante es que acabe bien, como también fue. Lo que digo siempre, no dejéis que nadie os cuente las cosas, vedlas por vosotros mismos y disfrutad a tope de lo que nos da la vida. Hasta otra!